José Carlos Marrero González

Fernando Clavijo se va para los madriles como senador, pero no porque en verdad lo desee, sino por estar harto de una lenta Justicia que, según Coalición, les persigue. Y, como se suele decir, “hermanos, sí; pero primos, no”. Eso al ex-alcalde chicharrero, José Manuel Bermúdez le ha sentado a cuerno quemado, porque ya se veía de senador. Pero calla, respeta disciplinadamente… y espera inteligentemente liderando la oposición en Santa Cruz. Con Carlos Alonso hay opiniones y apuestas varias. Unos dicen que el expresidente se queda hasta que CC nombre nuevo candidato para el cabildo tinerfeño y otros dicen que antes de fin de año estará alquilando piso en Bruselas. Y el exalcalde de La laguna, José Alberto Díaz, ha vuelto a su despacho profesional, pero seguirá en el ayuntamiento lagunero también liderando la oposición. Él es de los que vive la política intensamente y desde las alturas (como si de un dron se tratara) y está convencido de que, desde el consenso, hay futuro. Veremos…

De izquierda a derecha: Carlos Alonso, José Alberto Díaz, José Manuel Bermúdez y Fernando Clavijo.

Por su parte, al flamante presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín (PSOE) se le ve tranquilo y relajado. Siendo alcalde de Guía de Isora, he coincidido un montón de veces con Pedro en El Corte Inglés, sobre todo en su supermercado, que para mí es como una terapia antiestrés. Me consta que cuando Pedro Martíntenía que venir de gestiones a la capital, siempre buscaba un ratito (muchas veces junto con su encantadora esposa) para “desconectar” y relajarse en El Corte Inglés (aunque no compraran nada). Si me lo permite, presidente, le aconsejo que nunca pierda esas buenas costumbres, y no deje que desde el partido o la institución le “esclavicen” y llenen su agenda, más allá de lo correcto, protocolario y necesario. Don Pedro, busque ratitos para “bajar a la calle”, seguir con sus “escapadas” a El Corte Inglés (o donde sea, claro) y, sobre todo, no se olvide de regresar siempre a Guía de Isora. Porque nunca hay que olvidar los orígenes de uno. Amén.

Pedro Manuel Martín Domínguez (PSOE) actual presidente del Cabildo de Tenerife.

Muchas veces he escrito en El Cotarro que el día que perdamos nuestras tradiciones, apaga y vámonos. Hace unos meses, una empresa “de fuera” terminó la estructura de un edificio en Santa Cruz y solo puso “su” bandera corporativa. Hace poco leí que godo no es una procedencia, sino un proceder. Y es verdad. En Canarias, desde siempre, cuando en una obra se hormigona el techo más alto, se celebra la tradicional “puesta de bandera” culminando la estructura con una bandera de España y, desde hace tiempo, junto a la canaria. No lo pone el Convenio de la Construcción, pero sindicatos y patronal lo respetan. Y eso hizo el puntal Francisco Rodríguez Reyes, gran contratista donde los haya y líder de la empresa que lleva su nombre y que comanda junto a su hijo, Francisco Rodríguez Herrera, que además es ingeniero de edificación. Me permitirán que, en aras de conservar la tradición, me haga eco de esta puesta, que no fue de una bandera, sino de ¡hasta siete! celebrada en La Laguna.

De Izda. a Dcha.: las banderas del Grupo FR, La Laguna, Tenerife, Navarra, Canarias, España y no cupo en la foto la de Europa.

El jueves, al acabar el hormigonado del último techo, se colocaron las de Europa, España, Canarias, Navarra (patria chica de Don Raúl, uno de los promotores), Tenerife, La Laguna y la de Construcciones Francisco Rodríguez Reyes, (Grupo FR, de Valle de Guerra, que si no lo pongo me matan). Luego se compartió un almuerzo donde, como es tradicional, coincidieron los jefes de la contrata con sus trabajadores; los arquitectos y aparejadores y la propiedad del edificio. La base siempre es la cocina canaria y no puede faltar la carne de cochino y un buen vino del país. Cumpliendo la tradición, todo esto siempre lo paga (y lo pagó) el contratista. Se llamará edificio Riezu, nombre de la localidad de origen de don Raúl (navarro de nacimiento y tinerfeño de adopción) y el proyecto ha sido elaborado en el estudio MENUCE Arquitectos, comandado por Jorge Menéndez Díaz y su hijo Jorge Menéndez Ucelay. Tiene 7 plantas, se acabará en octubre de 2020 y desde su azotea podrán disfrutar de unas impresionantes vistas en 360º de La Laguna. Un detalle para los laguneros profundos: en los 360º no se ve en ningún momento Santa Cruz. La broma que no falte, y sea dicha siempre con todo respeto. Felicidades por la obra y por seguir la tradición.

Francisco Rodríguez (sentado con camisa blanca) con parte de su gran equipo.