Entiendo y respeto a quienes opinan que algunos hechos y actuaciones presuntamente protagonizados por el Rey Emérito, Juan Carlos I, pueden no haberles gustado y les haya podido defraudar. Puedo hasta compartir que aún siendo presuntos, parecen poco éticos y/o estéticos. Pero sería del todo injusto juzgar a una persona por lo supuestamente pasado en 4 años y olvidarse de los 40 anteriores. Sería injusto, erróneo, impresentable y cruel. Todos deberían ver el documental (sobre todo los menores de 45 años) y oír las declaraciones exclusivas de Juan Carlos I comentando episodios sobre su vida, momentos emotivos y dramáticos como su soledad cuando era niño o la muerte de un disparo de su hermano Alfonso, o recordando la última petición que le hizo Franco un día antes de morirse: “solo le pido que preserve la unidad de España”. Como esclarecedoras son los comentarios que en el documental expresan figuras como Alfredo Pérez Rubalcaba (Qepd) o Alfonso Guerra.
Juan Carlos I en el magnífico documental que ayer emitió Televisión Española.