Tiene casi 120 años de vida y ha estado colocado en la fachada de la reconocida farmacia Santos Lecuona de La Laguna, fundada en 1824 (dentro de 4 años cumplirá 2 siglos) en el Nº52 de la calle de La Carrera, donde se ha convertido en todo un icono de la ciudad. Se trata de un farol muy especial que el año 1901 compro y trajo de Sevilla el boticario Manuel Santos Madan, titular de la farmacia en aquel año. El emblemático farol y su soporte recuerdan el símbolo de los farmacéuticos: la copa de Higía, con la serpiente enroscada, que simboliza el poder del veneno, que o bien puede matar o bien curar, una vez convertido en medicamento en la copa.En el caso de nuestro farol, la copa sería la propia lámpara y su soporte está formado por una serpiente realizada en forja. Si lo miran detenidamente, lo verán sin problema. Con el tiempo se ha convertido en icono de la farmacia y objeto tradicional y muy respetado en el paisaje urbano del casco histórico lagunero. Pero la peatonalización ha quitado aceras y los políticos las jardineras que, de alguna manera, impedían que los coches y furgones se acercaran a las fachadas. Por ello y entre 2019 y lo que llevamos de puñetero y pandémico 2020, dos camiones han tropezado con la emblemática lámpara y la han tirado al suelo, causándole desperfectos preocupantes.
El emblemático farol en la fachada de la farmacia Santos-Lecuona en La Laguna