La carta que Santiago Negrín ha enviado a la presidenta del Parlamento, Carolina Dárias, transmite tristeza, hartazgo, pena, sentimiento, indignación. Y creo que no es para menos. Lo que Santi ha aguantado este último año (o más) por parte de políticos, empresarios y otros periodistas y medios de comunicación, no se lo merece ni mi peor enemigo. Si no fuera por Flori(su leal esposa) y el resto de su gran familia (que siempre le han apoyado y animado) habría sido imposible de aguantar. Santiago Negrín se ha ido demostrando al presidente Fernando Clavijo, una lealtad a prueba de infundios e injurias. Creo sinceramente que Santiago puede volver a la radio o a donde él quiera. Y que, allá a donde vaya, puede ir e irá con la cabeza muy alta. Ánimo, amigo, mucha suerte y siempre p’alante.
Santiago Negrín, el día de su toma de posición como director general de RTVC