Volviendo al seno de CC y de NC, me consta, están que trinan porque, personalizando en los dos líderes, ni Fernando Clavijo ni Román Rodríguez (amigos y compañeros hasta hace poco) no han sabido ponerse de acuerdo. Ha faltado humildad y generosidad y ha sobrado resentimiento y vanidad. Pero gente como Carmelo Ramírez (NC) en Gran Canaria, o José Alberto Díaz (CC) y Juan Manuel García Ramos (PNC) en Tenerife, son conscientes de que el mejor futuro pasa por esa unidad. Y después de lo sufrido y aguantado para acabar la legislatura, manteniéndose hábilmente como alcalde de La Laguna, muchos apuntan a que, si logra renovar como alcalde, José Alberto Díaz, desde la alcaldía de la “capital sentimental de Canarias” podría “pilotar”, con diálogo y por consenso (su especialidad) esa unión del nacionalismo canario.
Ya en una ocasión, José Alberto Díaz, en presencia del Obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, fue mediador entre Román Rodríguez y Fernando Clavijo.