Por si no conocen la historia, les recordaré que el año 1983, un grupo de amigos palmeros se reunían en una zona del Real Club Náutico de Santa Cruz de La Palma que llamaban “Los Alfaques”, y que cada sábado se unían al gran maestro Quico Concepción para ir con el grupo de “La Sabatina” a pintar paisajes palmeros… Entre ellos estaban Miguel Perdigón Benítez (el que fuera gran alcalde de la capital palmera) Tito Ayut (gran delantero del C.D. Mensajero que jugó en el Canarias de la primera división venezolana), Roberto Amador (ilustre empresario) y Víctor Lorenzo Díaz Molina (el gran Sosó, para los amigos) Un sábado se fueron de comida y vacilón para Fuencaliente y, metidos en “simones” (léase unos buenos vasos de vino) desembarcaron en la playa con sana alegría y unas algas por la cabeza a modo de corona… Los bañistas que por allí estaban les vieron con tan buena pinta, que comentaron… “¡tremendo desembarco de sirenas!” … Y como son los palmeros para poner nombres a personas y cosas, “Sirenas” les llamaron y “Sirenas” se quedaron, repitiendo el desembarco cada año.
Histórica foto de Las Sirenas, en uno de sus primeros cinco años de “desembarco”, con algunos de sus fundadores originales.