LA COÑA DE PASAR DE DENUNCIANTE A DENUNCIADO

Pero uno de los momentos más “impactantes” llega cuando parece que Javier Abreu manifiesta, delante de la jueza y la fiscal y todos los abogados allí presentes, que Santiago Pérez y su abogada en esta causa, Sandra Rodríguez (también política socialista y compañera de Juan Fernando López Aguilar, exministro de Justicia del Gobierno socialista de Zapatero) le prometieron de alguna manera que “si se portaba bien en su declaración” (la del pasado miércoles), se ocuparían o encargarían de que se le retirara su imputación en este dichoso “Caso Reparos”. ¡Agüita, Baleares! Claro que, con toda esta serie de manifestaciones oídas en sede judicial, a la rigurosa fiscal jefa, María Farnés, no le faltó tiempo para solicitar que Santiago Pérez García sea investigado por un posible delito contra la justicia

Los políticos Javier Abreu (i) y Santiago Pérez, cuando estaban “en sintonía”

SANTIAGO ESPERARÁ A QUE MARÍA FARNÉS LE CITE

Por su parte, Santiago Pérez no se ha callado y en la web oficial de su actual formación política, Avante La Laguna, ha dejado clarito que contestará a las “acusaciones infundadas” de Javier Abreu, si es llamado a declarar. En otras circunstancias (la historia así lo sugiere) Santiago Pérez habría convocado una rueda de prensa a bombo y platillo, para contestar públicamente y en su caso rebatir delante de los medios a todas y cada una de las manifestaciones, afirmaciones y denuncias de Javier Abreu. Pero no ha sido así, Santiago Pérez se reserva para responder a las preguntas que en su caso le haga la fiscal jefa María Farnés en acto judicial. Y, mientras tanto, sigan bailando, sigan bailando.

Santiago Pérez en una de sus últimas comparecencias públicas en rueda de prensa

POR SU LADO, JOSÉ ALBERTO DÍAZ ESPERA Y AVISA

Justo el día después, en la misma sede judicial y también ante la jueza Ana Serrano-Jover y la fiscal jefa de Santa Cruz de Tenerife, María Farnés, el que fuera alcalde de La Laguna y hoy líder de la oposición en la corporación lagunera, José Alberto Díaz Domínguez se acogió a su derecho de no declarar y no contestar a las preguntas de sus señorías y los abogados presentes (incluido el suyo). Pero pidió que constaran en acta unas manifestaciones que resumió, exactamente, en 9 contundentes puntos. Creo interesante destacar lo que José Alberto apuntó en algunos de ellos. En el primero, José Alberto dijo que: “me reservo el derecho de solicitar de Su Señoría prestar declaración cuando se hayan unido a las diligencias la información, documentación y certificaciones requeridas al Ayuntamiento de La Laguna. Será en ese momento, cuando previo el examen de toda la documentación e identificados los hechos supuestamente delictivos, pueda ejercer con plenitud el derecho a la defensa y, en su caso, proponer la práctica de las diligencias que exoneren plenamente de responsabilidad penal”. O sea, avisa y… espera.

José Alberto Díaz, prefiere no declarar (por ahora) pero avisa y, mientras tanto, espera

DEFENSA DE LA PROFESIONALIDAD FUNCIONARIAL

También en su manifestación José Alberto Díaz fue contundente, claro y directo cuando dijo: “deseo dejar constancia de mi pesar por la comparecencia como investigados de los empleados públicos municipales que se vuelven a ver afectados por un conflicto político promovido por los concejales denunciantes”. Además, José Alberto remató diciendo: “lo han hecho a pesar de la limitación de medios. Por ello, agradezco el esfuerzo profesional y el compromiso personal en el desempeño de sus funciones”.Hay que reconocer que, aunque hoy estén distanciado y ni se dirijan la palabra entre ellos, José Alberto Díaz y Javier Abreu coincidieron en dejar claro (y esto les honra a ambos) que los funcionarios públicos del Ayuntamiento de La Laguna son unos funcionarios que ejercen su trabajo con total profesionalidad, independencia y rigor. Creo que eso, en la inmensa mayoría de los funcionarios públicos es así, aun sabiendo que, como en todas las profesiones y sectores (periodismo incluido) siempre hay por ahí alguna “oveja negra” indeseable.

Los políticos José Alberto Díaz (i) y Javier Abreu, cuando estaban “en sintonía”