De su diálogo con todas las partes, pudo verse la problemática desde otro punto y entenderse con otro criterio, todo ello bajo la rigurosa profesionalidad de los funcionarios técnicos de la Gerencia de Urbanismo y, por supuesto, desde la más estricta legalidad. La cosa es que, más que retirar “el” cartel, parece que lo que se solicitaba era retirar “uno” de los “dos” carteles que tenía el Tocuyo en su fachada, para quedarse solo con uno, como el resto de los establecimientos del casco histórico. Dicho y hecho. Aclarada la cosa y conseguido el consenso con la ayuda del alcalde, el propio equipo que lidera Manuel García se ocupó el viernes de retirar el cartel que estaba sobre el dintel de la puerta y, de rebote, que quedara “salvado” para siempre el emblemático de azulejos y cerámica. Creo que, por consenso, todos nos merecemos unos berberechos brindando con una cervecita o con una copa de “vino con vino”, las cascaras de los manises al suelo y que el cartel del Tocuyo siga en la pared por siempre.

Clientes y fans del Tocuyo, contentos con la salvación del cartel-mural de casi 40 años

En este domingo en el que de nuevo estamos en campaña electoral de cara a las próximas elecciones del 26M, termino diciéndoles que, en sus años mozos y con menos barriguita que ahora, claro, el hoy alcalde de El Rosario, el desinquieto Escolástico Gil Hernández, fue muy buen y “guerrillero” jugador del C.D. Tenerife. Donde hubo siempre queda y el otro día Escolástico volvió a vestirse de corto con el equipamiento del “Tete” para jugar en el “derbi” entre los veteranos del Tenerife y los de la U.D. Las Palmas y en el que, por cierto, ganaron los canariones. Celebro que, hartos de tanta política crispada y mal entendida, un político sencillo y de a pie, como Escolástico Gil, tenga siempre tiempo para “desconectar” y estar con los suyos echándose un vaso de vino y jugando un partidito de fútbol, aunque sea metidito en “michelines”. Ojalá que la campaña electoral se viva con la misma intensidad y deportividad que el “derbi” de los veteranos del “Tete” con los “Pío-Pio” … Favores que agradecerán…

Escolástico Gil, alcalde y exfutbolista del Tete… que debe bajar barriga

Hoy estamos a siete días de las ya pasadas elecciones generales y a un tiro de voto de las próximas municipales del 26 de mayo. No me resisto a compartir con ustedes mi análisis y reflexión sobre lo sucedido en clave canaria. No tiene discusión en las elecciones al Congreso el sobresaliente triunfo del Partido Socialista Canario (PSC-PSOE) con 5 diputados. Podemos y el Partido Popular (PP) igualaron resultado con 3 diputados. Y también empataron Ciudadanos (Cs) y Coalición Canaria (CC) pero con 2 diputados. Todo estaba en el aire y muchos pensaban que Ana Oramas podría quedarse sin escaño. Pero hay que reconocer la notable recuperación y el aguante de CC, cuyos resultados no solo renovaron el escaño para Ani, sino que, además, entró como nueva diputada la palmera Guadalupe González Taño.

Ana María Oramas y Guadalupe González, las dos diputadas de Coalición Canaria.

Pero el mosqueo, malestar y la tristeza de muchos, radica en la constatación de que la desunión del nacionalismo canario moderado, escenificada en el “divorcio” entre Coalición Canaria (CC) y Nueva Canarias (NC), con la aparente complicidad por omisión del Partido Nacionalista Canario (PNC), ha dejado a NC sin escaño y, posiblemente, a Canarias sin un grupo parlamentario propio que, dicho sea con respeto a todos los restantes grupos, creo que buena falta nos hace. Puedo asegurar y aseguro que, tanto en Gran Canaria como en Tenerife, mucha gente está “rascada” por el hecho de que Fernando Clavijo (CC) y Román Rodríguez (NC) no hayan sabido ponerse de acuerdo en beneficio de todos y, lo más importante, para el mejor futuro de Canarias.

Román Rodríguez y Fernando Clavijo, están condenados a entenderse.