NO ESPEREMOS A QUE VUELVA A SUCEDER

Cuando veo hechos y sucesos como los ya mencionados, me acuerdo de las torres de electricidad de la autopista del sur que, durante la tormenta tropical Delta, en noviembre de 2005, se doblaron como si fueran de papel. Nunca se supo a ciencia cierta cuándo se habían revisado sus estructuras y no sé si actualmente pasan alguna inspección técnica… Y cada año me acuerdo de la carretera de La Aldea, en Gran Canaria, y de las de Teno o La Punta, en Tenerife. No sé si las obras necesarias para garantizar su seguridad dependen del Gobierno de Canarias, que hoy preside Fernando Clavijo, o es responsabilidad del Cabildo de Tenerife, que actualmente preside Carlos Alonso, o del ayuntamiento, que regenta (hasta que le presenten la requeteanunciada moción de censura) José Alberto Díaz. Tampoco sé si es cosa de instancias mayores, dependientes de Estado, pero sí sé que hay que garantizar su seguridad ahora mismo, antes de que pase algo.

FOTO 2.- CARRETERA LA PUNTA

700 metros de carretera donde se barrunta la tragedia, desde el café Melita al monumento a Los Sabandeños. Ya la señal avisa del peligro de desprendimientos.

Dejar un comentario