“De una noche de luna llena que la princesa Tayda paseaba por un jardín de cactus que jamás había visto, a medida que iba adentrándose descubría sus flores. Eran desproporcionadas de tamaño, belleza y aroma. Emocionada cogió todas las que pudo y, sin darse cuenta, al arrancar la última, Tayda se pinchó con un cactus y una gota de sangre tiño una de las preciosas flores. Enfurecida Isora, al ver que su jardín había sido invadido, reconoció la sangre real invocó a Guayota, (demonio que vive en el corazón del Teide) decretando el hechizo que la convertiría a Tayda en dragón. “Drágora el dragón, te llamarás y una flor nunca más arrancarás”. El triste dragón marchó muy lejos, pero regresaba cada luna llena para beber del rocío de sus flores. Al tiempo, Isora, paseando por su jardín, fue sorprendida cuando vio que, de la flor donde había encontrado la sangre real de Tayda había crecido un fruto que recordaba a un dragón. Impresionada, pensó que debía elaborar un elixir a base del precisado fruto, al que añadió unos gramos de uva madura y maracuyá, y así liberar a la princesa de su castigo. Drágora, en la siguiente luna llena, regresó a beber de las flores que Isora había bañado con su más preciado brebaje y, en ese momento se rompió el hechizo y así nació este elixir, de una historia sin príncipes, solo para ellas”. Llamen a Pitaber (922 768 152) y degusten el elixir “Ínsula Dragonaria”.
La sugerente botella del elixir “Ínsula Dragonaria – Tayda” hecho a base de pitaya