♦ Hablando de romerías y de romeras, tengo que contarles que hace unos días y atendiendo a la petición que cada año me hace el amigo Pedro Molina Ramos, tuve el honor de presentar la ofrenda de alimentos a San Benito, que posteriormente son donados a comedores sociales… A la ofrenda siempre asisten las tres romeras mayores (la infantil, la adulta y de la tercera edad) a las que yo llamo por sus nombre para que acerquen al santo con algunos alimentos… Este año la romera adulta fue Romina Elorrieta y la de la tercera edad, María Úrsula González… Hasta aquí todo dentro de la habitual normalidad… Pero por primera vez, en los diez que se viene celebrando la ofrenda (y yo presentándola), nunca había tenido que pedir a la romera infantil y a toda su corte de honor, que cada una de las niñas me deletrearan sus nombres despacito… Apunten y vean: Ayelén (la romerita mayor infantil) junto con Ashley, Aithiara, Íria y Zaida (sus cuatro damitas de honor)… ¡Échenle repudio (y no sé si canariedad) a los nombres de las criaturas!
El alcalde José Alberto Díaz (d) entrega flores a Ayelén, Ashley, Aithiara, Íria y Zaida