Mes: junio 2017

La pasada semana ilustré El Cotarro con un simpático dibujo que me llegó de forma anónima por WhatsApp. Me llegó tal cual lo puse, sin título alguno y sin firma de autor. Pensé que era un dibujo anónimo que corría por la red para denunciar, de forma inteligente, irónica y con elegante y educado sentido del humor, el mal uso que muchas veces se está haciendo de nuestro “traje de mago”. No sabía que el dibujo procedía de una página de Facebook titulada y/o protagonizada por “El Típico de Tenerife”, que se presenta como “un personaje ficticio”. Aún sigo sin saber quién es (aunque me gustaría conocerle) pero, en cualquier caso, quede claro que la autoría del dibujo es suya, de “El Típico de Tenerife”, al que le pido disculpas por poner su dibujo sin pedirle permiso (por que desconocía su autoría) y sin citarle expresamente (porque le desconocía y desconozco a él) aunque ya he contactado por Facebook y puedo decirles que es un caballero.

El pasado martes, el llamado Día de Canarias, tuve que ir al Puerto de la Cruz y, entre ida y venida, llegue a la conclusión de que el personal debe tener un potaje con esto de la identidad canaria que alguien debe “encarrilar”. Me temo que el presidente Fernando Clavijo (que creo lo tiene claro) y mucha gente que le rodea (que igual no lo tiene tan claro) deberían urgentemente poner manos a la obra en el asunto, corregir el “surco” y rápidamente “sembrar” bien…, si quieren “cosechar” mejor.

Está en manos de todos consensuar definitivamente los símbolos que nos unirán en el futuro

Yendo para el norte fui oyendo a Puchi Méndez en Radio Club y pude notar que la audiencia tiene un desapego con el himno “oficial” de Canarias con partitura de Juan José Falcón Sanabria y letra del amigo Benito Cabrera. El propio Benito (cosa que le honra) reconoció que el pueblo no ha terminado de hacer suyo este himno. Por el contrario, quedó más que claro (nuevamente) que el pasodoble Islas Canarias, con partitura del maestro José María Tarridas, y letra original de Joan Picot sigue siendo nuestro “himno oficioso” y que, allá donde suena, a los canarios se nos pone la carne de gallina, los pelos de punta y, a poco que estemos lejos de aquí, la lagrima en el ojo. Por cierto, yo me quedo con la versión de Los Sabandeños y la Orquesta Sinfónica de Tenerife.

Tres grandes músicos Juan José Falcón Sanabria (i), José Tarridas (c) y Benito Cabrera,

Nada más entrar en el Puerto de la Cruz percibo una dejadez en el municipio que lidera como alcalde Lope Afonso. En la entrada por la carretera del Botánico, cuatro banderas flanquean a un gigante cartel con el nombre de “Puerto de la Cruz”. La bandera canaria, al igual que la de España, Tenerife y la propia del Puerto están en un triste y lamentable estado. Sucias, descoloridas, deshilachadas. Para tenerlas así, señor Lope, mejor dejar los mástiles vacíos… o quitarlos. Sin embargo, llegando al casco, me veo al restaurante El Chinyero engalanado con motivo del Dia de Canarias y dos tremendas banderas de nuestra comunidad, ¡dos y grandes…, pero distintas!

La bandera de Canarias actualmente “oficial” aprobada por nuestro Parlamento