Mucha gente habla de un temblor sísmico sucedido la madrugada del día de Reyes en las cercanías de nuestro padre Teide y tan solo a unos tres kilómetros de profundidad. Pero paralelamente, mucha gente habla de otro terremoto (empresarial, en este caso) que podría haber activado otro “volcán” cuya posible erupción podría a su vez acarrear resultados imprevisibles y difíciles de cuantificar… Y es que, tremenda es la que se ha montado con el cambio, cese, sustitución, relevo o como quieran ustedes calificar, al hecho de que mi tocayo presidente de la Confederación Provincial de Empresario de Santa Cruz de Tenerife – CEOE Tenerife, José Carlos Francisco Díaz, haya prescindido (me comentan que casi con nocturnidad y alevosía) de los prestigiosos empresarios Martín García Garzón (Grupo Montesano, Lanzateide y otras empresas), Francisco “Paco” Gómez Méndez (Grupo PIDA, y Lanzateide, y otras empresas) y José Luis García Martínez (ex presidente de la Cámara de Comercio y propietario de Friogar y otras empresas) como puntales de su Comité Ejecutivo, conformado por el propio José Carlos Francisco Díaz como presidente del mismo y hasta 24 personas más. Como si solo tres fueran… “incómodos”.
José Carlos Francisco Díaz