Después de mi visita a los alrededores del recinto y hablar con un buen número de personas, coincidí con el alcalde lagunero, Luis Yeray Gutiérrez, en el restaurante Casa Juanito (gentilmente cedido por su propietario, el puntal Juan Antonio Ramos) donde se iba a reunir con los vecinos de la zona. Pude ver que, además de otros concejales socialistas, estaba y pudo entrar Sergio Alonso, concejal de Coalición Canaria. A mi no me dejaron entrar a la reunión, ni a los compañeros del Diario de Avisos, porque, según comentó Moisés Grillo (jefe de Prensa del Ayuntamiento lagunero) era solo para concejales y vecinos. Creo que eso es otro error (no de Moisés) y que, para Luis Yeray, su grupo de Gobierno y para todos los vecinos, hubiese sido mucho mejor haber dejado que entraran los medios que quisieran y hablar de todo, como se suele decir, con luz y taquígrafos, con transparencia y sin tapujos. Porque creo que es el alcalde Luis Yeray Gutiérrezquien está apechugando con “el marrón” y al que ya le preguntaba la gente que, por qué todos en La Laguna y solo en La Laguna. No merece Luis Yeray, ni La Laguna. ni la ciudadanía lagunera que se abuse de su histórica y más que demostrada solidaridad.
Un buen número de inmigrantes escuchan a los políticos socialistas. Luego, muchos de ellos, a seguir durmiendo al raso y a deambular por las carreteras.
Reconozco que al Sr Luis Yeray más que enfadarse con él por admitir lo inadmisible, hay que compadecerlo porque cuando pase el tiempo y se consulten las hemerotecas él aparecerá como uno de los responsables.
Respecto a no permitir la entrada a los periodistas es muy lógico si tenemos en cuenta la » transparencia política » actual.