♦ Para muestra, un botón a modo de hipótesis… Una curiosa hipótesis política, oída en vivo y en directo en un importante y muy influyente despacho empresarial de Tenerife, pero con intereses en casi todas las islas… La misma se basa en que, si es importante para Canarias que los dos grandes partidos (PP y PSOE) no se resquebrajen con los piques y trifulcas internas, aún más importante sería que el escenario político de esta tierra contara con un proyecto nacionalista unitario, moderno, centrado y moderado… La hipótesis, además, parte de la certeza (o corazonada) de que si no hay unión, en las próximas elecciones generales (que podrían ser el 22 o el 29 de noviembre) ni la mismísima Ana María Oramas volvería a revalidar su escaño para Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados… Y menos Pedro Quevedo, su escaño para Nueva Canarias… Es más… Mucha gente, incluso de los grandes partidos nacionales (que lo reconocen por lo bajini, aunque no lo digan públicamente) reconocen que el hecho de que esta tierra tuviera “grupo parlamentario propio” en el Congreso, sería muy interesante y más que oportuno, conveniente… y rentable para nuestro futuro. Ellos (todos) sabrán lo que hacen.
Ana María Oramas González-Moro tiene el reto de revalidar su escaño en el Congreso