EL MIRLO SE VIO, PERO SIN CAPTURAR SU IMAGEN

Les recuerdo para terminar que un personaje muy especial, Juan Canario, fiel lector de El Cotarro desde hace años, a la vez que autor de curiosos artículos publicados en la plataforma hermana, Canarias en Positivo, asegura haber visto un ejemplar de mirlo blanco (que augura buena suerte y mejor año y futuro) volando por los alrededores del Parque García Sanabria y ha pedido la colaboración de todos para confirmar la noticia. Reseñar, una vez más, que Juan Canario es el seudónimo que utiliza un veterano empresario canario de éxito, muy bien informado y gran analista de la realidad que padecemos, que ha vivido siempre de forma discreta y cuidando su anonimato todo lo que puede y más. Por ello, cada vez que Juan Canario desea hacer llegar alguna de sus sesudas reflexiones, manifestar su opinión o plantear sus curiosas teorías, escribe un artículo en la plataforma de análisis y debate, Canarias en Positivo, pero, en vez de firmarlo con su nombre, los artículos que escribe me los pasa a mí y yo los publico en su nombre. Los pueden ver y disfrutar de ellos leyéndolos en: canariasenpositivo.com

Fotografía de un mirlo blanco, aunque el del parque puede tener alguna manchita.

EL CONCURSO ACABARÁ, CON O SIN FOTO, EL DÍA 30

Esta pasada semana hemos recibido el mensaje de una persona que, no solo asegura haberlo visto, sino que lo grabó con su móvil hace un mes… pero que inconscientemente borró la grabación. Para terminar, les recuerdo que el curioso y desinquieto Juan Canario me propuso que hiciéramos un concurso público con dos premios. Seguimos premiando a la primera fotografía que nos llegue, y otro premio para la mejor y más bonita que nos llegue. Pero en las que se demuestre, clara y fehacientemente, que el mirlo blanco realmente existe y que está viviendo y volando por el parque García Sanabria o sus alrededores cercanos. Las personas que deseen participar, amantes a la fotografía o simplemente curiosos, solo tienen que enviar sus fotos en archivos en formato JPG, vía correo electrónico, a: info@elcotarro.com. El único requisito que se precisa es que en la foto quede claro que se trata de Santa Cruz de Tenerife, del parque o sus alrededores, y que, de alguna manera, se acredite que es una foto actual. Anímense, busquen al mirlo blanco (que encima les dará suerte) y envíennos su foto antes del día 30 de enero. Juan Canario y yo les diremos el resultado y lo que proceda en la edición de El Cotarro del día 31. Si es que se logra fotografiarlo, claro. Ahhh… Sepan que los mirlos suelen estar activos, volar y salir en las horas del amanecer y cuando está atardeciendo.

Bnn_Careca

ADIÓS A DON ROSENDO DÍAZ… ¡GENIO Y FIGURA!

Muchas veces suelo despedir y terminar El Cotarro recordando a uno de “los nuestros” que se ha ido para siempre. Este domingo me permitirán que, por el cariño, el respeto y la admiración que le tenía, comience con ello. Porque ayer despedimos a don Rosendo Díaz Pérez, todo un personaje al que se le puede aplicar, sin ningún género de dudas, lo de que ha sido “genio y figura hasta su sepultura”, en el panteón familiar (donde reposan los restos de su esposa, Ana María Domínguez Morales, fallecida hace años) y donde, según llegó a comentar el propio Rosendo en estos últimos meses, iba a estar rodeado por muchos amigos y amigas. El bueno y formidable (calificativo que él repetía mucho) Rosendo Díaz, fue durante más de 20 años gerente del recordado “Hospitalito de Niños”, que fundara el Diego Guigou el año 1901. Hecho a sí mismo, trabajador como él solo y amante de vivir la vida con optimismo, alegría y siempre en positivo fue y seguirá siendo un ejemplo para todos, comenzando por sus hijos y nietos.

Rosendo Díaz Pérez en su pequeño despacho de gerente, en el Hospitalito de Niños

HECHO A SÍ MISMO, SE GANÓ EL RESPETO DE TODOS

Desde muy joven, Rosendo Díaz Pérez comenzó a trabajar con Maximino Acea Perdomo (ex presidente del Cabildo, y propietario de la Compañía Cervecera de Canarias y de grandes almacenes de importación de alimentos) y llegó a ser su administrador de confianza en todo. Entre las miles de anécdotas que rodean la vida de Rosendo Díaz (casi todas positivas y más de una para partirse de risa) está la de ir a Bilbao después de la Guerra Civil, a buscar la maquinaria para la Compañía Cervecera de Canarias, la cual se había comprado antes de la guerra y sobrevivió intacta a la misma. De camino y en el mismo “paquete”, Rosendo se trajo un maestro cervecero alemán que conoció de causalidad en un urinario público. Profundamente creyente, Rosendo Díaz fue un ejemplo permanente de sensibilidad para con las personas más necesitadas y, seguramente por eso, Maximino Acea, Eduardo García Ramos y el Guigou le pidieron y lograron que se fuera como gerente el Hospitalito de Niños.

Primer edificio del Hospitalito de Niños fundado por el Dr. Diego Guigou el año 1901.