Muchas veces he escrito en El Cotarro que el día que perdamos nuestras tradiciones, apaga y vámonos. Hace unos meses, una empresa “de fuera” terminó la estructura de un edificio en Santa Cruz y solo puso “su” bandera corporativa. Hace poco leí que godo no es una procedencia, sino un proceder. Y es verdad. En Canarias, desde siempre, cuando en una obra se hormigona el techo más alto, se celebra la tradicional “puesta de bandera” culminando la estructura con una bandera de España y, desde hace tiempo, junto a la canaria. No lo pone el Convenio de la Construcción, pero sindicatos y patronal lo respetan. Y eso hizo el puntal Francisco Rodríguez Reyes, gran contratista donde los haya y líder de la empresa que lleva su nombre y que comanda junto a su hijo, Francisco Rodríguez Herrera, que además es ingeniero de edificación. Me permitirán que, en aras de conservar la tradición, me haga eco de esta puesta, que no fue de una bandera, sino de ¡hasta siete! celebrada en La Laguna.
De Izda. a Dcha.: las banderas del Grupo FR, La Laguna, Tenerife, Navarra, Canarias, España y no cupo en la foto la de Europa.