Menos mal que la alcaldesa María Concepción Brito, es lista como una tea y, pasito tun-tún, va dejando claro quién es quién y de igual manera, quién manda. En estos últimos carnavales Juan Carlos Armas, en su condición de concejal de Fiestas, ha bordado la organización del 15º Encuentro Regional de Murgas y lo ha complementado con un «encuentro gastronómico-murguero» en el popular restaurante «Los Parrandas», donde se reunieron los y las componentes de las 3 murgas venidas de Gran Canaria o, lo que viene a ser lo mismo, más de 200 murgueros y murgueras, que primero fueron a depositar una ofrenda a los pies de la Virgen de Candelaria, Patrona General de Canarias. Pero hay que reseñar y valorar que a todos los actos que como concejal de Fiestas organiza Juan Carlos, los festivos de los barrios o los carnavaleros (presentación del cartel del Carnaval, entrega de los premios, etc.) siempre llama a la Alcaldesa (como por otra parte es lógico) sin importarle que le robe protagonismo. Así lo hizo en un emotivo homenaje al recordado Luis Hormiga «Suspi», donde la alcaldesa Mary Brito y Juan Carlos Armas entregaron un recuerdo a su viuda y su hijo, continuador de la obra de su padre en Los Bambones. Al margen de los “celos” de algunas personas, ¡olé! por el saber hacer de la alcaldesa Mary Brito y ¡olé! por la lealtad de Juan Carlos desde el buen trabajo.
Juan Carlos Armas (i) la viuda y el hijo de Luis Hormiga (c) y la alcaldesa, Mary Brito (d) en el homenaje tributado al querido “Suspi” en el 15º Encuentro de Murgas