En este año 2020 tendríamos que hacer extensiva la dedicatoria a Chuchín “El Cuijo”, a Juancho López-Echeto, Gustavo (el de la tasca “Dos y Una”), a Miguel “El Naripa”, a los hermanos de Manolo:Adrián y Gilberto Alemán, a Norberto “Zenón” (el fotógrafo), al puntal farmacéutico Enrique Lecuona Ribot, al gran abogado Federico González de Aledo, al irrepetible Pedro Molina Ramos“El Mago”… y así, a otros muchos laguneros ejemplares y, muy especialmente, por su reciente fallecimiento, al gran orfebre Juan Ángel González García (que en paz descanse) uno de los puntales en la reciente restauración de la Sagrada Imagen del Santísimo Cristo de La Laguna y, más concretamente, de su altar-retablo. Muchos amigos me han preguntado que, en este 26º aniversario de su primera edición en El Cotarro, por qué no volvía a rescatar las rimas de “La noche de los laguneros” y volviesen a ver la luz pública. Y tal día como hoy, con el permiso una vez más de Emilio “El Pupi”, vuelvo a cometer la osadía de compartirlas con todas y todos ustedes…
El gran orfebre Juan Ángel González García, recientemente fallecido