El primero de ellos, ya conocido, se cuece a fuego lento en el ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, teniendo como cocineros a Patricia Hernández (actualmente alcaldesa) a José Manuel Bermúdez (que quiere volver a serlo) y a Evelyn Alonso (que actúa como “pinche” de cocina y que tendrá en su mano si el potaje terminará siendo de espinaca o de berro). El segundo “potaje” está cociéndose en el seno del Gobierno de Canarias y, más concretamente, en el entorno del Comité de Emergencia Sanitaria que lidera el presidente Ángel Víctor Torres. En este caso, el malestar (que en algún caso ha llegado a indignación) tiene que ver con la toma de determinadas medidas que afectan a sectores estratégicos (por ejemplo, alguno relacionado con el Turismo) sin consultar y asesorarse debidamente con verdaderos implicados y expertos del sector. Y el tercer “potaje” se cuece en el seno del Cabildo de Tenerife, donde su presidente, Pedro Martín (que se lo está currando) podría estar molesto (con razón) porque más de un miembro de su equipo no termina de estar al nivel que él precisa y demanda. Me asegura una persona, fuente digna de todo crédito, que el bueno de Pedro Martín le ha llegado a pedir que le facilite nombres de personas preparadas y capaces para ocupar determinados puestos, donde hoy la cosa no termina de funcionar correctamente y a su gusto.

Ángel Víctor Torres, Patricia Hernández y Pedro Martín, en tres distintos “potajes”

El pasado 11 de mayo se cumplieron 4 años de la inauguración de la primera fábrica de Hipoclorito Sódico de Canarias, ubicada en la dársena pesquera de Santa Cruz de Tenerife. Ha sido un apasionante proyecto hecho realidad gracias a la iniciativa, tesón y trabajo de un grupo de emprendedores canarios,liderados por el químico, Miguel Valcárcel, y el ingeniero Javier Marrero, que fundaron la empresa BIOMCA Química y que, gracias a aquella fábrica, lograron que Canarias fuera ya autosuficiente en lo que a las necesidades de hipoclorito sódico se refiere. Hoy BIOMCA es una feliz realidad de una exitosa fábrica, que ha dado un paso hacia adelante y que acaba de reconvertirse (en tiempos difíciles) para ayudar a toda la sociedad canaria a combatir esta maldita pandemia del COVID-19. Y es que, desde hace unas semanas, la empresa ha lanzado HYGIENIC, una nueva división desde la que ya están fabricando soluciones desinfectantes hidroalcohólicas y cloradas.

Panorámica de parte de la fábrica de BIOMCA Química en la Dársena Pesquera

Esta reconversión, a favor y en beneficio de nuestra sociedad, la ha conseguido en muy poco tiempo, gracias a que todas las partes han puesto lo mejor de sí mismas. Estos productos requieren de unos exigentes controles y de una serie de permisos y autorizaciones que dependen de muchos organismos, comenzando por la rigurosa Agencia Estatal del Medicamento, pasando por el Gobierno de Canarias, y terminando con la Secretaría General de Sanidad, que dependen de la Dirección General de Salud Pública, Calidad e Innovación, del Ministerio de Sanidad. Todo ello, además, bajo una estricta normativa europea. Pero, reitera Miguel Valcárcel, no solo no han puesto pegas, sino que, dada la situación de emergencia, todas las administraciones han estado a la altura y han acelerado y facilitado la gestión de los permisos para fabricar dos productos ahora casi “vitales” para la desinfección de personas (TP1), superficies y espacios (TP2): una solución hidroalcohólica y dos soluciones cloradas. La gran noticia ha llegado esta semana con la inclusión, por parte de la Subdirección General de Sanidad Ambiental y Salud Laboral, en la lista de productos biocidas a nivel nacional, que es el paso previo para su inclusión definitiva, lo que convierten a BIOMCA Química en la única empresa en Canarias para fabricar este virucida, tan importante para luchar contra el coronavirus COVID-19.

Muestras del Biomca HYGIENIC Hands en varios escenarios de su uso

La solución hidroalcohólica, fabricada con la base de propanol, se comercializa bajo la marca Hygienic Hands y está específicamente destinada a la desinfección personal de manos. Por su parte, la solución clorada, basada en cloro activo, se denomina Hygienic Spray y está destinada a la higiene y desinfección general de superficies. Por último, se ha desarrollado Hygienic Ambient, un desinfectante destinado a un uso profesional, que se aplicará mediante técnicas de nebulización, para desinfectar espacios. Visiblemente satisfecho y merecidamente orgulloso, Miguel Valcárcel me dice que ahora esta realidad está ya a disposición de todos los canarios, ya que BIOMCA ha logrado cerrar importantes acuerdos con distribuidores, empresas del sector farmacéutico y del sector sanitario, lo que hará que estos productos lleguen muy pronto a toda la población. O sea, que ya saben también en productos industriales y sanitarios, hay que apostar por lo cercano, por lo nuestro, en este caso, por BIOMCA y por Hygienic.

Fíjense en la marca y en los envases, porque “estos son los fabricados” en Canarias