Mes: julio 2020

Avancé en la pasada edición de El Cotarro la noticia (creo que en primicia) de que, finalmente, el Tribunal Supremo había dictado sentencia en favor del Real Casino de Tenerife. Una sentencia que había recibido con lógica satisfacción el presidente actual de la sociedad, Miguel Cabrera Pérez-Camacho y su junta directiva y por la cual, los arrendatarios del local donde se ubica desde hace años el veterano Bar Atlántico, con su popular terraza exterior, deberán devolver el local a la propietaria del mismo, la emblemática sociedad tinerfeña. Faltó decir, porque es de justicia, que el pleito que ahora ha resuelto el Supremo partió del año 2015, siendo presidente de la sociedad el oftalmólogo José Alberto Muiños Gómez-Camacho. El Real Casino de Tenerife se fundó el año 1840 (está cumpliendo ¡180 años¡) y el local de la planta baja se arrendó por primera vez en 1935, para más tarde, desde 1948 quedar alquilado a la Familia Coll.

José Alberto Muiños Gómez-Camacho, expresidente del Real Casino de Tenerife

El contrato era de los llamados “de renta antigua” y, por ello, el Real Casino, durante la presidencia de José Alberto Muiños, entendió que, a partir de la publicación y entrada en vigor de la nueva Ley de Arrendamientos Urbanos, el alquiler debía actualizarse en tiempo y forma, o bien el local revertir la propiedad. Discrepancias que no vienen a cuento, llevaron el caso a los tribunales, y es aquí cuando hay que decir, reconocer y valorar la estratégica visión de un joven, pero experimentado abogado tinerfeño, Leopoldo Cólogan Rodríguez de Azero, que en aquel momento era, precisamente, miembro de la Junta Directiva del Real Casino. Leopoldo Cólogan es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid (San Pablo CEU). Inició su carrera a comienzos del año 1997, tras haberse formado con experiencias en Madrid, Dublín y Bruselas. Lleva más de veintitrés años en el ejercicio de la abogacía – más de ocho de ellos como socio de la firma internacional Garrigues –, y fundó en el año 2017 el primer “Law Hotel^®”, un nuevo concepto y marca de despacho, en Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias. (leopoldocologan.com)

Leopoldo Cólogan Rodríguez de Azero, abogado fundador y director de Law Hotel

Fue clave y es de justicia destacar que fue Leopoldo Cólogan el que enfocó la estrategia y el modo de plantear el proceso legal pero que, muy caballerosamente y al ser miembro de la Directiva de la sociedad, entendió que él no podía ser quien llevara el pleito y sugirió, en un nuevo acierto, que fuera su colega José Manuel Niederleytner quien lo llevara, como así se acordó. Licenciado en Derecho por la Universidad de La Laguna, el acreditado abogado, José Manuel Niederleytner García-Lliberós, es el socio fundador y director ejecutivo del reconocido despacho Niederleytner abogados, en Santa Cruz de Tenerife, y, desde el año 2016, es el Decano del Ilustre Colegio de Abogados de Santa Cruz de Tenerife, y es también vicepresidente del Consejo Canario de Colegios de Abogados y consejero del Consejo General de la Abogacía Española.

José Manuel Niederleytner García-Lliberós, director de Niedertleyner Abogados

Tras ganarse el pleito en primera y segunda instancia, después de los oportunos recursos, el tema llegó al Tribunal Supremo que, hace unos días firmó y comunicó la sentencia final en firme. Lo que comenzó inteligentemente bajo la presidencia de José Alberto Muiños Gómez-Camacho y con la estratégica visión de Leopoldo Cólogan Rodríguez de Azero, ha terminado felizmente bajo la presidencia de Miguel Cabrera Pérez-Camacho y con el magnífico asesoramiento jurídico de José Manuel Niederleytner. En un gesto que honra a Miguel Cabrera, el actual presidente no dudó en llamar a Leopoldo Cólogan para felicitarle y agradecerle su visión, enfoque y planteamiento inicial del pleito que, cinco años después, ha servido para que el Supremo, haya dado la razón al Real Casino. Ahora, educada y elegantemente, me consta que Miguel Cabrera ya está en diálogo con los inquilinos, los herederos de Eduardo Coll Díaz, para que, lo antes posible y de la mejor manera, el local retorne a la entidad y ésta pueda otorgar una nueva y actualizada concesión.

Miguel Cabrera Pérez-Camacho, actual presidente del Real Casino de Tenerife