El desinquieto empresario Wolfgang Kiessling, presidente del grupo Loro Parque y Siam Park, a la vez que propietario del Hotel Botánico, el restaurante Brunellis y el aquarium Poema del Mar, en Gran Canaria, no para. Ahora, a sus jóvenes 81 años de edad, quiere convertir a nuestro emblemático Botánico, en el Puerto de la Cruz en un hotel de referencia internacional en el que se pueda adelgazar, pero, curiosamente, comiendo. Para ello ha contratado al reputado chef francés Patrick Jarno, avalado por una larga trayectoria en el afamado resort de la Bretaña francesa Quiberon, que va a dirigir la cocina del proyecto que se denominará “Botánico Slim & Wellness” algo así como adelgazar con bienestar. Vamos, sin sufrir y comiendo…. moderadamente, claro.

Wolfgang Kiessling (i) propone adelgazar con la cocina de Patrick Jarno.

Se trata de una cuidada propuesta que ayudará a recuperar una figura esbelta y el tono muscular, además de la vitalidad y la energía que proporcionaran el bienestar y el equilibrio de cuerpo y mente. El propio Wolfgang Kiessling confesó que al menos una vez al año intenta bajar “esos kilitos de más”, que no le gusta hacer cinta ni bicicleta estática y que ha sufrido las dietas radicales de algunos centros que denominó de forma simpática como “manicomios para adelgazar”. Con el proyecto que propone en el Botánico a partir del día 1 de junio, afirma que en tan solo una semana se pueden bajar hasta 5 o 7 kilitos, degustando los platos elaborados por el gran equipo de cocina del Botánico con la filosofía del chef Patrick Jarno.

El equipo de cocina del Hotel Botánico, junto con Wolfang Kiessling (c), el chef Patrick Jarno a su derecha y la directora del Spa del Botánico, a su izquierda.

ComienzoEl Cotarro de hoy con sentimientos encontrados. Por un lado, un enorme sentimiento de orgullo y satisfacción por los éxitos de un paisano tinerfeño, el gran tenor Jorge De León, lagunero para más señas, que triunfa a nivel mundial en el difícil, exigente y competitivo mundo de la gran Lírica. Pero, por otro lado, tengo un sentimiento de incomprensión, cabreo y rabia por ver que, mientras por el mundo se “rifan” a Jorge para que ponga su voz en los teatros y escenarios más importantes del planeta, aquí (por lo que se ve) no se le valora lo suficiente. Desde el 2011, hace ahora ya más de 8 años, el gran Jorge De León no protagoniza una ópera en nuestro Auditorio de Tenerife. Eso, en otros sitios, sería inimaginable. El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ya está enterado de esta realidad y, supongo, le “cantará alguna ópera” a más de uno.

Jorge De León (primero de la izquierda) recibiendo la ovación del público en el escenario del Metropolitan Opera de Nueva York.

El pasado mes de marzo y en el mismísimo The Metropolitan Opera (The MET), de Nueva York, Jorge De León protagonizó con total éxito el papel de Radamés, en la ópera Aída de Giuseppe Verdi, bajo la dirección del gran Plácido Domingo. Este próximo miércoles protagonizará Tosca, de Giacomo Puccini, en la Ópera Alemana de Berlín (el principal teatro de ópera de Alemania y uno de los más importantes del mundo) y el primero de mayo debutará en Málaga, protagonizando el papel del general moro Otelo, en la ópera homónima, también de Giuseppe Verdi. Mientras tanto, los responsables de la programación operística de aquí, parece que están en Belén con los pastores. Lo dicho, esperemos que se pongan a la altura de Jorge De León (que es mucha) y muy pronto veamos y oigamos a nuestro tenor cantando en “su” casa, que es la nuestra.

Jorge De León (convertido en Radamés) junto al gran Plácido Domingo.