El Gobierno de Canarias y su consejería de Sanidad han conocido en lo que va de legislatura hasta cuatro directores en el ya mencionado SCS: Blanca Méndez (con Teresa Cruz como consejera), Antonio Olivera (con Julio Pérez como consejero provisional), Alberto Pazos (ya con Blas Trujillo) y ahora Conrado Domínguez. Conozco a Conrado y confieso que le tengo en gran estima y que me parece un gran profesional, preparado, cercano y campechano (que tendrá sus defectos, como todos nosotros) pero que cuenta con un importante respaldo de los profesionales del sector y con experiencia más que contrastada en este cargo, que ostentará por segunda vez, después de haberlo ocupado (como independiente) durante la presidencia de Fernando Clavijo (Coalición Canaria) siendo consejero de Sanidad, José Manuel Baltar(también independiente). Un tándem de lujo que debió seguir, por encima de ideologías y partidismos…, pero somos como somos. Me atrevo a decir que, si después de todo lo que ha pasado, le han vuelto a llamar y Conrado ha aceptado el cargo, no me vayan ahora a ser puñeteros ni mezquinos. Permitan a Conradotrabajar, tomar decisiones y organizar sus equipos. Déjenle, simplemente, ser y hacer. Démosle sanitariamente de nuevo, a los tres, Ángel, Blas y Conrado, 100 días de gracia. Qué menos.
Conrado Domínguez Trujillo, renovado director del Servicio Canario de la Salud